VATICANO,
El Director de la Sala de Prensa del Vaticano, Greg Burke, dio a conocer este martes 30 de enero una declaración en la que afirma que el Papa Francisco está bien informado sobre la situación de la Iglesia Católica en China y que es "lamentable" que algunas "personas de la Iglesia" digan lo contrario generando "confusión y polémica".
La declaración señala que "el Papa está en constante contacto con sus colaboradores, en particular los de la Secretaría de Estado, en relación a los asuntos de China, y es informado por ellos fiel y detalladamente sobre la situación de la Iglesia Católica en China y los pasos en el diálogo en progreso entre la Santa Sede y la República Popular de China, que sigue con especial atención".
"Es por ello sorprendente y lamentable que lo contrario sea afirmado por personas de la Iglesia, generando confusión y polémica", concluye.
Aunque no lo menciona, la declaración aparece un día después de que el Obispo Emérito de Hong Kong, Cardenal Joseph Zen ze-kiun, publicara en su sitio web una carta en la que explica y analiza la difícil situación por la que atraviesa la Iglesia Católica en China, en particular los obispos, ante las presiones y la persecución que sufre por parte del gobierno comunista.
En la misiva que publicó en su sitio web, el Cardenal recuerda que en los últimos días los medios han informado que el Vaticano solicitó a un obispo su renuncia y a otro que acepte su dimisión para permitir que obispos afines el gobierno asuman sus cargos.
La detallada carta del Purpurado tiene un tono bastante crítico respecto a las negociaciones del Vaticano con el gobierno chino, en la que además denuncia diversos problemas que sufren los prelados católicos en el país: "He visto directamente la esclavitud y la humillación a la que son sometidos nuestros hermanos obispos", señala.