LIMA,
En la actividad más multitudinaria de su visita al Perú, con más de 1,3 millones de asistentes, el Papa Francisco presidió una Misa en la Base Aérea Las Palmas, donde reflexionó sobre la importancia de hacer presente a Jesús allí donde uno se encuentre y rechazar la tentación del desaliento.
Al llegar al lugar, abarrotado de fieles, el Santo Padre hizo un tour en el papamóvil que duró aproximadamente media hora para poder saludar a la multitud que lo esperó desde la noche anterior en la base aérea, y que a pesar del cansancio lo recibió con mucha alegría.
En el inicio de la Misa, el Pontífice se tomó unos minutos para bendecir la imagen de Nuestra Señora de la Evangelización, la Patrona de la Arquidiócesis de Lima.
Aunque la temperatura no fue demasiada alta, la sensación de bochorno era grande. Por eso y desde mucho antes de la Misa, los bomberos ayudaron a paliar el calor con grandes chorros de agua sobre la gente.
Bomberos rociaron agua a fieles en Las Palmas ante el fuerte calor. https://t.co/9iOhSCmDHu #FranciscoEnPerú pic.twitter.com/HmDI7eCK2m
- Agencia Andina (@Agencia_Andina) 21 de enero de 2018