MADRID,
El Cardenal Carlos Osoro, Arzobispo de Madrid (España), habló en su carta pastoral sobre la Jornada del Emigrante y Refugiado para animar a los cristianos a asumir tres compromisos en relación con estos hermanos.
El próximo domingo 14 de enero la Iglesia católica celebra la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, por eso el Cardenal Carlos Osoro, Arzobispo de Madrid (España) aseguró que le "preocupa mucho la triste situación de tantos migrantes y refugiados que están con nosotros".
"Algo hemos de hacer. No podemos quedarnos con los brazos cruzados quienes hablamos de defensa de la dignidad del ser humano y, sobre todo, los que creemos que todo ser humano está creado a imagen y semejanza de Dios".
Según explica el Cardenal, en los numerosos encuentros que ha mantenido en sus visitas a las parroquias de la Archidiócesis, o cuando ha celebrado al Misa en la cárcel o en el CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros), se encuentra "con la realidad dolorosa del migrante y del refugiado".
Por eso, con motivo de la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, el Purpurado anima "a construir la gran familia de los hijos de Dios".
Para ello propone que el Padrenuestro, "oración y modo de estar en la vida que nos enseñó Jesús y que los cristianos tantas veces rezamos, no sea una oración más, sino que sea un programa de vida de quienes nos sabemos hijos de Dios y, por ello mismo, hermanos de todos los hombres".