REDACCION CENTRAL,
La respuesta de la Corte Interamericana de Derechos Humanos a Costa Rica, exigiendo la aprobación del matrimonio y la agenda gay, es una imposición y una "flagrante violación a la soberanía" que afectaría a toda América Latina, advirtieron diversos expertos.
La Corte Interamericana publicó el 9 de enero de este año su "Opinión consultiva sobre identidad de género, y no discriminación a parejas del mismo sexo", con la que responde a una serie de consultas realizadas por Costa Rica sobre temas de identidad de género y matrimonio homosexual.
Según este documento, el registro del cambio de sexo en documentos estatales "es un derecho protegido por la Convención Americana" de Derechos Humanos.
La Corte exige luego que se extienda las figuras jurídicas existentes en el país "a las parejas compuestas por personas del mismo sexo –incluyendo el matrimonio".
El organismo determina también que la Convención Americana "no protege un determinado modelo de familia" y asegura que "la definición misma de familia no es exclusiva de aquella integrada por parejas heterosexuales".
La Corte alentó además a los países firmantes del Pacto de San José, adscritos a su jurisdicción, a "vencer dificultades institucionales para adecuar su legislación y extender el derecho de acceso a la institución matrimonial a las parejas del mismo sexo".