ROMA,
Marta tiene 79 años de edad y ha sorprendido a propios y extraños con una inusual forma de ayudar a los pobres.
Según informa el diario Avvenire el 30 de diciembre, la señora Marta vive en el barrio Santa Rita de la ciudad italiana de Turín. Todos los días, en su bicicleta, rescata de la basura de los supermercados unos 40 kilos de comida para dárselos a varias familias pobres.
"Es increíble cuánto se desperdicia. Se bota el alimento que está por vencer o cuya confección no es perfecta. En estos días, por ejemplo, están las naranjas. Si una está mala, botan toda la bolsa de 5 kilos. Es vergonzoso", comenta esta jubilada que vive con su esposo y que es madre de un médico y una bióloga.
Ante las miradas de curiosidad o sospecha de quienes ven lo que hace desde hace ya varios años, esta italiana afirma que "no me interesa. Lo hago porque sé que hay personas que necesitan y que me esperan".
Si bien acude todos los días a la basura de los supermercados, Marta distribuye los alimentos tres veces por semana en Casalborgone, una localidad ubicada a unos 30 kilómetros de Turín hasta donde llega en su automóvil.
Esta ayuda comenzó hace un tiempo con una familia que estaba por perderlo todo a causa de la crisis económica. Ahora, las ocho familias a las que sirve, relata, "me acogen siempre con los brazos abiertos y con mucha dignidad".