VATICANO,
En el Ángelus de este domingo 31 de diciembre, fiesta de la Sagrada Familia, el Papa Francisco indicó cuál es la misión hacia la que está orientada la familia.
Ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro en el Vaticano, el Pontífice dijo que la misión de la familia, de los padres esencialmente, es "crear las condiciones favorables para el crecimiento armónico y pleno de los hijos, con el fin de que puedan vivir una buena vida digna de Dios y constructiva para el mundo".
El Papa hizo hincapié en la alegría que los hijos suponen para la familia: "Una gran alegría de la familia es el crecimiento de los hijos. Están destinados a desarrollarse y a fortalecerse, a adquirir sabiduría y a acoger la gracia de Dios, como hizo Jesús. Jesús realmente es uno de nosotros", afirmó.
Ante la multitud congregada bajo la ventana de los aposentos pontificios del Palacio Apostólico, el Santo Padre reflexionó sobre "la experiencia vivida por María, José y Jesús mientras crecen juntos como familia en el amor recíproco y en la confianza en Dios".
Francisco afirmó que José y María expresan esa confianza en Dios cumpliendo el rito de la presentación del Niño en el templo: "Los padres de Jesús acuden al templo para dar fe de que su hijo pertenece a Dios y que ellos son los custodios de su vida y no los propietarios".
"Este gesto subraya que solo Dios es el Señor de la historia individual y familiar; todo procede de Él. Toda familia está llamada a reconocer tal primado, custodiando y educando a los hijos para que se abran a Dios, que es la fuente de la vida".