ROMA,
El Senado de Italia aprobó el pasado 14 de diciembre la ley conocida como el "testamento vital", que según algunos críticos abre el camino para la eutanasia en el país, y que ha sido rechazada por los obispos locales.
La norma se aprobó por 180 votos a favor, 71 en contra y 6 abstenciones, y permitirá a los enfermos disponer de un testamento previo y vinculante para el médico y los familiares.
La decisión del paciente sobre la interrupción o no recepción de hidratación y alimentación artificiales en caso de incapacidad, quedará ahora establecida en el documento "Disposiciones anticipadas de terapia" (DAT).
La norma precisa que ningún tratamiento o procedimiento puede realizarse sin el consentimiento pleno, libre e informado, de forma escrita o a través de medios informáticos, del paciente o de los padres o tutores en el caso de menores.
El Primer Ministro de Italia, Paolo Gentiloni, festejó en Twitter la aprobación de la ley que consideró una "elección de civismo" y un "paso adelante por la dignidad de la persona", mientras que la Presidenta de la Cámara de los Diputados, Laura Boldrini, indicó que "de ahora en adelante los enfermos, sus familias y los profesionales médicos estarán menos solos en situaciones dramáticas".
Por su parte, el Presidente de IDEA, Gaetano Quagliariello, expresó su "firme rechazo" a la ley a la que consideró como "la vía italiana a la eutanasia".