DENVER,
La famosa "isla de los Jedi", donde se rodó el Episodio VIII de la saga de Star Wars, fue hace cientos de años el hogar de recios monjes irlandeses que construyeron una iglesia en honor a San Miguel Arcángel.
Mons. James Conley, Obispo de Lincoln, Estados Unidos, recordó la historia de las dos Islas Skellig en Irlanda, donde se grabaron varias escenas de los episodios VII "El Despertar de la Fuerza", y VIII "Últimos Jedi".
En declaraciones a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI –, comentó que viajó a la isla Skellig Michael cuando "recién me había convertido al catolicismo".
Su motivación surgió tras leer "sobre esos increíbles monjes que vivían en esa roca y oraban, y como no había tierra, tuvieron que construir camas con algas para cultivar cualquier alimento".
"Ellos llevaron una vida ascética increíble en estas frías rocas y todo lo que hicieron fue orar, eran como esos monjes ascéticos de los primeros tiempos del cristianismo que vivían en el desierto y que llevaban un estilo de vida que uno difícilmente puede imaginarse hoy", expresó Mons. Conley.