VATICANO,
La comunidad internacional debe unir fuerzas para eliminar la trata de personas y sus causas profundas, dijo el martes el representante del Vaticano ante las Naciones Unidas.
"Para erradicar la trata de personas, debemos enfrentar todas sus causas económicas, ambientales, políticas y éticas, pero es particularmente importante prevenir y poner fin a las guerras y conflictos que hacen que las personas sean especialmente vulnerables a la trata", dijo en un discurso esta semana el Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Bernardito Aúza.
En ese sentido, el Arzobispo recordó que debido a que "las guerras y los conflictos violentos se han convertido en la mayor fuerza motriz del desplazamiento humano forzado", los traficantes aprovechan este caos para explotar a las personas vulnerables y utilizarlas para la esclavitud sexual o el trabajo forzado.
Mons. Aúza agregó que una consecuencia típica de la guerra es una gran población de personas desplazadasque a menudo se convierten en migrantes y refugiados en otros países, lo que hace que sea especialmente importante que los países también trabajen para proteger a estas poblaciones.
En los últimos años, Europa ha experimentado una crisis de refugiados a un nivel desconocido desde la Segunda Guerra Mundial, con millones de personas huyendo de la violencia y la inestabilidad en gran parte en Medio Oriente, dejando a un gran número de personas, particularmente mujeres y niños, vulnerables a la trata.
Según los informes de The Guardian, la Unión Europea informó de más de 15.000 casos de tráfico sexual entre 2013 y 2014, aunque las autoridades esperan que el número real sea mucho más alto.