VATICANO,
En un discurso pronunciado en el Aula Pablo VI del Vaticano ante los delegados del Congreso Mundial de Religiones por la Paz, que tiene lugar en Roma, el Papa Francisco destacó el importante papel que tienen las religiones en la construcción de la paz.
"En la construcción de la paz, las religiones, con sus recursos espirituales y morales, tienen un papel particular e insustituible. No pueden tener una actitud neutra ni, mucho menos, ambigua respecto a la paz", aseguró.
En su discurso, el Santo Padre afirmó que "la paz es una tarea urgente también en el mundo de hoy, en el que tanta población ha sido golpeada por la guerra y la violencia. La paz es, al mismo tiempo, un don divino y una conquista humana. Por ello, los creyentes de cada religión están llamados a invocarla y a interceder por ella".
"También todos los hombres de buena voluntad, especialmente los que desempeñan cargos de responsabilidad, están llamados a trabajar por esa paz, con el corazón, con la mente y con las manos, para que la paz se construya de forma artesanal. En este trabajo, paz y justicia se construyen juntas".
Al igual que en ocasiones anteriores, el Pontífice destacó la gran inmoralidad que reside en la justificación de la violencia en nombre de Dios: "Quien comente violencia o la justifica en nombre de la religión, ofende gravemente a Dios, que es paz y fuente de paz, y que ha dejado en el ser humano un reflejo de su sabiduría, potencia y belleza".
Además, destacó también la necesidad de una colaboración interreligiosa para el cuidado del medio ambiente. "Entre las religiones es necesario un esfuerzo común de colaboración también para promover la ecología integral".