ROMA,
Este martes 17 de octubre las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), conformadas por árabes y kurdos del país, y la coalición internacional liderada por Estados Unidos, liberaron la ciudad siria de Raqqa del control de los terroristas del Estado Islámico (ISIS) tras cuatro meses de combates.
Raqqa, ubicada en el noreste del país, era considerada "el bastión del ISIS en Siria" desde que fue invadida por los yihadistas en marzo de 2013. Hasta entonces residían allí unas 1500 familias cristianas. En junio de 2014 los terroristas proclamaron el califato y convirtieron a esta urbe en su capital.
Photos to civilians were able to flee #ISIS stronghold areas in #Raqqa city
- ????? ???? ???? (@Raqqa_SL) 13 de octubre de 2017
The source :: @AFP . pic.twitter.com/qQwAfoQ9Da
En declaraciones a ACI Prensa, Alexis Tardy-Joubert, jefe de la misión en Siria de la organización de ayuda francesa SOS Chrétiens d'Orient, indicó que la mayoría de los cristianos "huyeron de la ciudad antes de la llegada del ISIS".
Solo se quedaron unas 50 familias cristianas que decidieron pagar la jizya (el impuesto para los no musulmanes). Sin embargo, las condiciones de vida eran muy duras porque los terroristas realizaban diversas crueldades contra la población, como exhibir en picas cabezas decapitadas, o hacer ejecuciones públicas. También destruyeron iglesias y forzaron a las mujeres, sin importar su religión, a vivir bajo la ley de la sharia.