BOGOTÁ,
El Obispo de Neiva en Colombia, Mons. Froilán Casas, exhortó a que se haga justicia y se llega a la verdad de los hechos tras el asesinato de 6 campesinos en la zona de Tumaco, fronteriza con Ecuador, el pasado jueves 5 de octubre.
La violencia de ese día en el que se realizaba un operativo para erradicar el cultivo de coca, causó la muerte de seis personas, entre ellas dos indígenas, y dejó heridas a otras 20 en Tumaco, la zona en el país con mayor cantidad de cultivos.
Las comunidades campesinas han denunciado que uniformados abrieron fuego contra los manifestantes que rechazaban la erradicación. Como resultado de estos hechos, algunos miembros de las fuerzas del orden han sido suspendidos.
Al respecto el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió el lunes a la fuerza pública "cooperar" con las investigaciones iniciadas para determinar de dónde salieron las balas que provocaron la muerte de al menos seis campesinos.
De acuerdo al diario El Tiempo, el Ministerio de Defensa indicó que disidentes de las FARC, al mando de alias "Guacho", dispararon contra las fuerzas del orden y los cocaleros.
El Ministro Luis Carlos Villegas ratificó el lunes que las versiones de los policías, quienes señalan al disidente de las FARC, "siguen siendo muy importantes para esclarecer la verdad".