BOLOGNA,
En la visita del Papa Francisco a Cesena y Bologna no podía faltar un encuentro con los estudiantes y el mundo académico, puesto que esta última es conocida en toda Europa por recibir cada año a miles de estudiantes procedentes de todo el mundo y porque la ley del sistema universitario de toda la Comunidad Europea lleva su nombre.
El encuentro tuvo lugar en la Plaza de la Basílica de San Domenico. Después de un saludo del profesor Francesco Ubertini, Rector del alma Mater Studiorum, Francisco dirigió algunas palabras.
En su discurso, el Papa explicó que "es un desafío actual" el "reafirmar los derechos de las personas y de los pueblos, de los más débiles, de quien es descartado, y de lo creado, nuestra casa común".
"¡No se contenten con pequeños sueños, sino sueñen en grande!", dijo el Santo Padre a los estudiantes. "Renuevo con ustedes el sueño de un nuevo humanismo europeo para lo que sirve memoria, valentía, sana y humana utopía".
"Donde los jóvenes respiren el aire limpio de la honestidad, amen la belleza de la cultura y una vida sencilla, no contaminada por las infinitas necesidades del consumismo, donde casarse y tener hijos son una responsabilidad y una gran alegría", sostuvo.
Francisco resaltó además que "la Universidad de Bologna es desde hace miles de años laboratorio de humanismo: aquí el diálogo con las ciencias ha inaugurado una época y ha plasmado la ciudad".