ROMA,
La situación de la región de Marawi, en Filipinas, tomada por los simpatizantes del grupo terrorista Estado Islámico hace tres meses, "continúa siendo crítica", aseguró el Prelado de Marawi, Mons. Edwin de la Peña.
En comunicación con la agencia vaticana Fides, Mons. De la Peña señaló que "la situación en Marawi continúa siendo crítica, pero esperamos un resultado positivo".
Desde fines de mayo, terroristas musulmanes que juraron lealtad al Estado Islámico desataron una ola de violencia en la región de Marawi, al sur de Filipinas.
Como parte de sus ataques, los terroristas tomaron e incendiaron la Catedral de María Auxiliadora y secuestraron a los cristianos que se encontraban dentro. Entre ellos, el sacerdote Chito Sunganob.
A fines de agosto, las autoridades recuperaron gran parte del control de la ciudad y la Catedral de Marawi, pero los terroristas mantienen presencia en un área muy reducida, alrededor de una mezquita.
"Las noticias son alentadoras –expresó el Prelado de Marawi–, sabemos que nuestros rehenes católicos están vivos y que el ejército ha garantizado que no serán considerados 'daño colateral', y que se hará todo para llevarlos a un lugar seguro".