LIMA,
Un misionero dominico de 100 años de edad, que era devoto de San Francisco Javier, falleció el pasado 11 de septiembre en el convento ubicado dentro del Santuario de Santa Rosa en Lima, Perú.
Según informó la orden de los Dominicos a través de su cuenta de Facebook, el P. Vicente Guerrero Carbonell cumplió 100 años en el pasado mes de junio. Su funeral se realizó el 12 de septiembre en la Basílica de Santa Rosa, ubicada dentro del santuario, y fue enterrado al día siguiente en el Cementerio Británico.
Un amigo suyo, el P. Ignacio Iraizoz, dijo a ACI Prensa que el P. Guerrero "era un hombre de cualidades destacadas. Podía conversar con los más humildes y dialogar con la gente de los estamentos más altos de la sociedad. Tenía ese don de gentes".
Describió que él "se ponía al servicio de todas sus amistades, de la comunidad y sobre todo de los misioneros. Era un hombre muy eficiente, inteligente, afable, jovial, austero y estaba al día en todos los asuntos teológicos".
También comentó que el P. Guerrero nació en la ciudad española de Navarra en el seno de una familia católica y que era devoto de San Francisco Javier, un santo jesuita que también es originario de esa urbe y que evangelizó en la India y Japón.
El sacerdote relató a ACI Prensa que la vocación misionera de su amigo "se debe a San Francisco Javier, un hombre sobresaliente que entrega el todo por el todo".