BUENOS AIRES,
Ante el peligro de convertir la Misa para niños en una "fiestita" y despojarla de su carácter sagrado, el Arzobispo de La Plata en Argentina, Mons. Aguer, recordó la disciplina de la Iglesia sobre el modo de recibir la Eucaristía.
El 8 de Septiembre, fiesta de la Natividad de la Virgen María, Mons. Aguer emitió el decreto "Sobre el modo de recibir la Eucaristía", tras advertir que en algunas comunidades, especialmente escolares, no se respeta la correcta distribución de la Comunión.
El Arzobispo de La Plata criticó que "el equívoco pretexto de adaptar la celebración eucarística a los niños, la convierten en una 'fiestita', la despojan del carácter sagrado que le corresponde, y constituyen un factor gravísimo de deseducación en la fe".
En ese sentido, fue preciso en señalar que desde la Primera Comunión a los niños se les debe instruir, "según el espíritu de la Iglesia y no la propia preferencia de quien los prepara", la forma de recibir la Eucaristía, que puede ser de pie o de rodillas, en la boca o en la mano.
Por lo tanto, en su decreto prohibió "expresamente que se imponga a los niños, a partir de su Primera Comunión, recibir en la mano el Cuerpo del Señor".
Para que "ellos puedan elegir libremente", continuó el Prelado, "es nuestro deber ilustrarlos sobre el modo de realizar cualquiera de esos gestos como expresión de fe y de profunda veneración".