BOGOTÁ,
Durante el recibimiento del Papa Francisco en la Nunciatura Apostólica tras su regreso de Villavicencio, una mujer compartió un desgarrador testimonio sobre cómo perdió a toda su familia en un ataque perpetrado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y expresó su deseo de perdonar a estos asesinos.
Los guerrilleros volaron con explosivos un oleoducto y su pueblo Machuca, ubicado en el departamento de Antioquía, se incendió. Esta masacre perpetrada el 18 de octubre de 1998 dejó un saldo de 84 muertos y solo sobrevivieron 30 personas, entre ellas María Cecilia Mosquera.
"Creí que era el fin del mundo. Mi casa ardía en llamas. Mientras se quemaban mis brazos y mis pies, intenté desesperadamente salvar a mis tres pequeños hijos y a mi marido. Caí inconsciente", narró.
Cuando despertó en el hospital se enteró que todos fallecieron. "Me quedé sola en el mundo", expresó.
"Le pregunté mil veces a Dios ¿por qué a mí? Me preguntaba si yo había hecho lo suficiente para salvarlos. Las profundas cicatrices en el cuerpo y en el alma me respondieron. Es un dolor muy grande que llevo vivo en el corazón", manifestó.