RIO DE JANEIRO,
Moussa Diabate es un musulmán que estaba a punto de matar a un amigo suyo por ser cristiano, pero Jesús tocó su corazón y se convirtió también al cristianismo, por lo que tuvo que sufrir el rechazo, las golpizas y amenazas de muerte por parte de su propia familia.
El 6 de agosto, Día de Oración por los Cristianos Perseguidos en Brasil, Moussa contó su testimonio a los pies del Cristo Redentor en Río de Janeiro en un evento organizado por la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).
Este hombre narró que nació en el seno de una familia musulmana sunita y que pertenecía a la tribu nómada de los tuareg. Su nombre original era Mohammed y era el primogénito de 19 hermanos.
En la década de los 90' Moussa tenía 16 años cuando estudiaba en Bamako, la capital de Mali, y se enteró que un amigo suyo se había convertido al cristianismo tras ser atendido por unas religiosas cuando fue abandonado en el desierto por su familia porque contrajo tuberculosis.
Moussa afirmó que como su compañero se convirtió, "tenía que matarlo para poder salvar su alma, y así también salvaría la mía; hasta su familia quería verlo muerto debido a su conversión".
"Fui al hospital en el que estaba, y cuando llegué, él me dijo: Se por qué vienes, pero antes permíteme que te diga una cosa. Jesús te ama", prosiguió.