VATICANO,
En un mensaje publicado con motivo del 25° Congreso Ecuménico Internacional de Espiritualidad Ortodoxa organizado por la Comunidad Monástica de Bose, Italia, el Papa Francisco animó a católicos y ortodoxos "a tomar medidas valientes y concretas hacia la plena comunión".
En el mensaje, el Santo Padre recordó que, aunque hemos recibido el regalo de un mundo "creado y reservado para nosotros, estamos aquí como extranjeros en la tierra, porque nuestra ciudadanía está en el cielo, lugar al que hemos sido invitados y donde se nos espera".
Esta reflexión sintoniza con el lema de este Congreso que se celebra desde hace 25 años: "El regalo de la hospitalidad". Francisco señaló que ese regalo, el de la hospitalidad, es el primero que recibió la humanidad, "antes que ningún otro regalo".
El Pontífice resaltó el carácter de "discípulo ambulante" que caracteriza a la humanidad, y destacó que ese rasgo es el que nos impulsa a fijar la mirada "en aquello que no está preestablecido, en la caridad que nos lleva a acogernos los unos a los otros como regalos del Señor, a procurar el bienestar y el afecto recíproco, a tener compasión, a formar parte del dolor de aquellos que sufren, a considerar como un mal propio las desventuras de los demás".
"Deseo que esa llamada sea reavivada por una escucha humilde y sincera, y por las reflexiones de estos días, para que cada vez más surjan sentimientos fraternos y que madure una auténtica 'hospitalidad del corazón', de forma que, mientras peregrinemos hacia el Reino, se nos impulse a tomar medidas más valientes y concretas hacia la plena comunión", afirmó el Papa.
Además, Francisco envió un "caluroso abrazo de paz a Su Santidad el Patriarca Ecuménico, el querido hermano Bartolomé, y a Su Beatitud Theodoros, Patriarca de Alejandría".