VATICANO,
Este domingo el Papa Francisco envió un especial mensaje a las madres que, como Santa Mónica, lloran por sus hijos.
En su cuenta de Twitter, el Santo Padre escribió el siguiente mensaje: "¡Cuántas mamás vierten lágrimas, como Santa Mónica, para que sus hijos regresen a Cristo! ¡No pierdan la esperanza en la gracia de Dios!"
Santa Mónica, cuya fiesta se celebra este 27 de agosto, fue la madre de uno de los santos católicos más importantes que se convirtió además en doctor de la Iglesia: San Agustín.
El padre de Agustín, Patricio, era un hombre violento y mujeriego. La Santa siempre sufrió a su lado pero nunca dejó de rezar por su conversión. Finalmente se bautizó y murió como buen cristiano.
Agustín vivió durante muchos años una vida libertina, muy alejado de Dios. Santa Mónica sufría mucho a causa de esto.