SALVADOR,
La Arquidiócesis de Salvador y la Nunciatura Apostólica en Brasil expresaron sus condolencias a las familias de las víctimas del naufragio de una embarcación en Bahía de Todos los Santos y que dejó decenas de muertos.
El accidente se dio la mañana del jueves 24 de agosto, cuando la embarcación que hacía la travesía entre Mar Grande y Salvador, se volteó con 120 personas a bordo, de las cuales 116 eran pasajeros y 4 tripulantes.
La Secretaría de Salud de Bahía (SESAB) informó que hasta la noche del jueves, 89 personas habían sido rescatadas con vida. De los fallecidos, 11 ya fueron identificados, entre los cuales se encuentran una niña, dos hombres y 8 mujeres.
En un mensaje enviado en nombre del Papa Francisco, el Nuncio Apostólico, Mons. Giovanni d'Aniello, afirmó haber acogido "con profunda tristeza, la noticia de la muerte de innumerables personas en el naufragio de una embarcación".
"Por la presente, en nombre del Santo Padre, el Papa Francisco, quiero manifestar sinceras condolencias a las familias de las víctimas, como también oraciones al Señor de la Vida para que acoja a los difuntos en su Reino de paz y de vida eterna", agregó.
También subrayó que, aún imaginando la desesperación de los que fueron afectados por la tragedia, "estoy seguro de que la confianza en Dios ayudará a creer siempre que: 'Aquel que cree en mí, aunque esté muerto vivirá'".