ASUNCIÓN,
El Vicario Apostólico de El Chaco Paraguayo, Mons. Gabriel Narciso Escobar Ayala, denunció que la justicia aún no llega como debería a esta zona del país sudamericano.
Lo que ocurre, explica el Prelado a la agencia vaticana Fides, es que los defensores públicos que ganan el concurso para trabajar en el departamento del Alto Paraguay, una vez obtenido el puesto y gracias a favores políticos, logran no trabajar en la zona y son inmediatamente trasladados a otras regiones.
En la nota, Mons. Escobar refiere que la oficina del defensor público, constituida en ese departamento en 2015, contempla la presencia de cuatro defensores. Desde entonces, trabaja solo uno de forma real en la zona. Los otros tres lo hacen en otras regiones.
"Es cierto que en este departamento la población es escasa pero, por su gran extensión, mucho mayor que la de otras regiones en el país, es imposible que una sola persona pueda ofrecer asistencia a todos los habitantes", explica el Vicario Apostólico.
"Hay muchas personas humildes en la zona, especialmente aquellas que trabajan como obreros o que están explotadas por los patrones y no reciben el sueldo que merecen por ley".
Estas personas que no tienen asistencia legal, concluye el Prelado, "acuden al obispo porque no pueden permitirse contratar a un abogado privado. Yo lo que les puedo dar es solo asistencia espiritual".