Luego de los violentos sucesos en Charlottesville, Virginia, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), creó un Comité Ad Hoc Contra el Racismo, el cual se enfocará en la influencia de este fenómeno dentro de la sociedad e incluso de la Iglesia, y en la urgente necesidad de hallar soluciones.
El Presidente de la USCCB, Cardenal Daniel N. Dinardo, señaló que los recientes acontecimientos han expuesto el alcance que aún tiene "el pecado del racismo" en la nación.
En ese sentido, explicó que el nuevo comité "estará totalmente dedicado a comprometer a la Iglesia y a nuestra sociedad a trabajar juntos en unidad para desafiar el pecado del racismo, para escuchar a las personas que sufren bajo este pecado y a unirse en el amor de Cristo para que se conozcan como hermanos y hermanas".
En una nota publicada este 23 de agosto, la USCCB informó que el comité contra el racismo estará presidido por el Obispo de Youngstown, Mons. George V. Murry. El resto de miembros serán nombrados en los próximos días y su mandato se confirmará en la primera reunión, que se espera sea dentro de poco.
Mons. Murry expresó su deseo de trabajar junto a sus hermanos obispos y con las comunidades de todo el país "para escuchar las necesidades de las personas que han sufrido bajo el pecado del racismo y juntos encontrar soluciones a esta epidemia de odio que ha plagado a nuestra nación por demasiado tiempo".
Recordó que "a través del ejemplo de amor y misericordia de Jesús, estamos llamados a ser un pueblo mejor que lo que hemos visto en las últimas semanas y meses como nación".