SANTIAGO,
La Iglesia en Chile celebró el día nacional de la Solidaridad este 18 de agosto con distintos gestos fraternos hacia los grupos más vulnerables y con una Eucaristía en cada diócesis por los 65 años del fallecimiento de San Alberto Hurtado, el primer santo chileno que trazó el camino de la justicia social.
En Santiago, luego de la tradicional visita de la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, a la tumba de San Alberto Hurtado; trabajadores y personas acogidas por el Hogar de Cristo, oraron y agradecieron en la Hora Santa, celebrada en la hora exacta de la muerte del sacerdote jesuita, ocurrida en 1952.
Por la tarde, el Arzobispo de Santiago, Cardenal Ricardo Ezzati, presidió una Misa en la parroquia Jesús Obrero y expresó que "en este tiempo de cambio cultural, donde pareciera que la verdad ya no importa tanto" es cuando se necesitan "padres de la patria, que nos digan cuál es nuestra vocación personal y nuestra vocación social".
"Chile necesita revitalizar su alma, encontrar nuevamente los grandes valores que lo hacen un pueblo de hermanos, donde la igualdad, la justicia y fraternidad sean los grandes valores que vivimos más allá de nuestras legítimas diferencias", expresó.
"Quienes pueden ser maestros cercanos de esa realidad, son en primer lugar los santos, porque ellos han experimentado la paternidad de Dios y también la fraternidad y el amor que estamos llamados a hacer presentes en la vida de nuestra comunidad y de la comunidad nacional", agregó.