Los defensores de la libertad religiosa fueron alentados por el Departamento de Estado de los Estados Unidos luego que este reconociera en su informe anual sobre libertad religiosa el genocidio de los cristianos cometido por el Estado Islámico (ISIS).
"La aplicación de la ley a los hechos que están al alcance lleva a la conclusión que ISIS es claramente responsable del genocidio contra yazidis, cristianos y musulmanes chiítas en las zonas que controla o controló", declaró el Secretario de Estado, Rex Tillerson, el 15 de agosto pasado al presentarse el informe sobre Libertad Religiosa Internacional 2016.
Añadió que ISIS también es responsable de crímenes "de lesa humanidad y 'limpieza étnica' dirigidos a estos mismos grupos, y en algunos casos contra musulmanes sunitas, kurdos y otras minorías".
El informe anual del Departamento de Estado existe a partir de Ley de Libertad Religiosa Internacional de 1998, que tiene como objetivo promover la libertad religiosa como parte de la política exterior de Estados Unidos.
El informe de 2016 hace referencia explícita al "genocidio" de cristianos, yazidis y musulmanes chiítas a manos de ISIS. Así lo afirmó también el entonces Secretario de Estado, John Kerry, en marzo del año pasado.
En 2014 los militantes de ISIS conquistaron grandes áreas de territorio en Irak y Siria, obligando a las minorías religiosas y étnicas de la región a quedarse y convertirse al islam, abandonar el territorio o morir.