SAN SALVADOR,
José Arturo Castellanos fue un católico de El Salvador que durante la Segunda Guerra Mundial sirvió como diplomático en la ciudad de Ginebra (Suiza) y allí logró salvar a 40 mil judíos del exterminio de los nazis.
Este gesto hizo que en julio del año 2010 se le concediera póstumamente el título de "Justo entre las naciones" otorgado a los no judíos por Yad Vashem, una institución del gobierno de Israel constituida para honrar la memoria de los mártires y héroes del Holocausto.
Este título también ha sido otorgado a sacerdotes, religiosas y otros laicos que salvaron a los judíos en esa época.
En julio de 2016, el Papa Francisco tuvo un encuentro en el campo de concentración de Auschwitz (Birkenau), ubicado en Polonia, con los representantes de algunos "justos entre las naciones" que ya habían fallecido.
José Arturo Castellanos nació en 1893 en El Salvador en el seno de una familia católica y de militares. En su juventud decidió ingresar al ejército al igual que su padre y comenzó a desarrollar una brillante carrera. En 1930 viajó a Europa para completar su educación.
Una biografía suya publicada en el sitio web de Yad Vashem indica que a los 44 años el coronel Castellanos fue enviado como diplomático a Inglaterra y en 1938 fue designado a Alemania.