ROMA,
La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) ha financiado varios cursos y campamentos de verano entre junio y septiembre para ayudar espiritualmente a miles de niños y jóvenes cristianos de países como Irak y Siria que sufren por los estragos de la guerra.
En información enviada a ACI Prensa, ACN indicó que desde hace varios años promueve esta iniciativa en países como Israel, Palestina y Jordania y que en esta ocasión decidieron implementarla en las ciudades de Alepo, en Siria, y en Alqosh, en Irak, porque estas zonas han sido liberadas del control de los terroristas hace más de seis meses.
La fundación pontificia indicó que además de ayudar a reconstruir los hogares de los cristianos en estos lugares, también se necesita restaurar "las almas y el espíritu de las personas, sobre todo de los niños y los jóvenes que tanto han sufrido".
Explicaron que los campamentos de verano en Irak buscan que los jóvenes provenientes de las aldeas cristianas en la Llanura del Nínive superen el trauma ocasionado por la ocupación del Estado Islámico (ISIS) durante más de dos años.
Los participantes han sido separados por edades y son atendidos por un "padre espiritual" que los ayudará a fortalecer su fe y esperanza ya que la comunidad cristiana en ese país está en riesgo de desaparecer porque muchos de los fieles huyeron del país o han sido asesinados por los terroristas.
Los jóvenes también reciben apoyo psicológico para que sepan cómo enfrentar los retos que tendrán en el futuro, como proseguir con normalidad su vida tras la liberación del control de ISIS.