ROMA,
La Presidenta del Hospital pediátrico Bambino Gesú de Roma, el llamado "Hospital del Papa", se ha ofrecido para acoger en sus instalaciones al pequeño Charlie Gard, un bebé que sufre una enfermedad terminal y a quien se le desconectará el soporte vital en los próximos días contra la voluntad de sus padres, pero con permiso del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
La Presidenta del hospital, Mariella Enoc, publicó un tuit en el que señalan que las palabras del Papa Francisco el domingo, en relación al pequeño Charlie, "resumen bien la misión del Hospital Bambino Gesú".
"Por este motivo, he pedido al director sanitario verificar con el Gran Ormond Street Hospital de Londres, donde se recupera el neonato, si hay las condiciones sanitarias para una eventual transferencia de Charlie hacia nuestro hospital. Sabemos que el caso es desesperado y que, hasta ahora, no hay terapias eficaces", indica la declaración.
"Expresamos nuestra cercanía a los padres en la oración y, si este es su deseo, estamos disponibles para acoger a su hijo con nosotros, por el tiempo que le quede vivir", concluye.
Charlie, actualmente de 10 meses, ha sido diagnosticado con el síndrome de agotamiento mitocondrial, una rara enfermedad genética que padecen muy pocos niños en el mundo.