SIDNEY,
El Arzobispo de Sidney, Mons. Anthony Fisher, salió en defensa de su compatriota el Cardenal George Pell, quien dejó el cargo de Prefecto de la Secretaría de Economía del Vaticano para defenderse ante las acusaciones de abusos sexuales en Australia.
En una declaración con fecha 29 de junio tras conocerse la acusación que la Policía de Victoria hizo contra el Cardenal Pell, el Arzobispo australiano dijo que "mucha gente estará en shock, como yo, por las noticias".
El Prelado indicó en la declaración que "el Cardenal Pell repetida y vehementemente ha rechazado estas acusaciones y ha insistido en que él es completamente inocente. Ahora tendrá la oportunidad de poner su caso ante una corte y está determinado a limpiar su nombre".
El Cardenal Pell, que anunció el 29 de junio que deja el Vaticano para volver a Australia y defenderse de las acusaciones, reiteró en conferencia de prensa su inocencia: "Rechazo con fuerza estas acusaciones que refuerzan mi voluntad de limpiar mi nombre", declaró.
El Purpurado comparecerá el próximo 18 de julio ante la justicia australiana donde será juzgado por "múltiples cargos" de abusos. Uno de ellos presuntamente ocurrido en 1962, hace 55 años.
El Arzobispo de Sidney explicó en su declaración que el Cardenal Pell ha cooperado con la Royal Commission, establecida en 2013 para tratar casos de abuso sexuales en Australia, "y las investigaciones de la policía y se ha asegurado de que el clero y los trabajadores eclesiales hagan lo mismo".