REDACCION CENTRAL,
La moda del "fidget spinner", el juguete más popular de este año, ya llegó a América Latina y ACI Prensa conversó con algunos sacerdotes de la región sobre si es posible darle un uso en la evangelización.
Mientras que algunos sacerdotes jóvenes consideran que el "spinner" es una oportunidad para explicar la Santísima Trinidad a algunos grupos; otros presbíteros advierten que el juguete debe ser usado con prudencia o simplemente nunca han escuchado de él.
El P. Jan Lozano, vicario del Santuario Señor de la Divina Misericordia en Lima (Perú), considera que se debe "utilizar todos los medios posibles y legítimos para hacer llegar el mensaje de Jesucristo".
"A los niños les fascina que les hables en su lenguaje. Lo digo porque celebro la Misa de niños en mi parroquia y es meter mucho la cabeza para dar a entender los misterios de Dios y de la moral cristiana. Se puede utilizar con discernimiento los deportes, películas, dibujos, juegos, para que capten la idea y la captan de inmediato", señala el presbítero de 25 años, conocido por el divertido videoblog promotor de vocaciones "No tengas miedo".
Sin embargo, reconoce que "una de las limitaciones sería que el spinner necesita ser movido por otro, mientras que Dios no necesita ser movido por nadie: su mismo ser es movimiento de amor en sí mismo y hacia su creación".
El P. Samuel Bonilla, conocido en las redes sociales como "Padre Sam", explica que el juguete "es una sola pieza, así como en la Trinidad es una sola naturaleza (la divina); son tres brazos giratorios distintos, así como en la Trinidad son tres Personas distintas (Padre, Hijo y Espíritu Santo)".