VATICANO,
En su catequesis de la Audiencia General de este miércoles, el Papa Francisco habló de los santos, "testimonios y compañeros de la esperanza".
El Pontífice recordó que se puede alcanzar la santidad cumpliendo con el deber de cada día con el corazón abierto a Dios. "Pensamos que es algo difícil, ser santos. Que es más fácil ser delincuente que santo. ¡No! Ser santo se puede porque nos ayuda el Señor. Es Él quien nos ayuda".
A continuación, el texto completo de la catequesis del Papa Francisco:
Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!
En el día de nuestro bautismo resonó para nosotros la invocación de los santos. Muchos de nosotros en aquel momento eran niños, llevados en brazos por sus padres. Poco antes de la unción con el óleo de los catecúmenos, símbolo de la fuerza de Dios en la lucha contra el mal, el sacerdote invitó a toda la asamblea a rezar por los que estaban a punto de recibir el bautismo, invocando la intercesión de los santos.
Esa fue la primera vez que, en el curso de nuestras vidas, nos regalaban esta compañía de hermanos y hermanas "mayores", -lo santos- que habían pasado por nuestro mismo camino, conocieron nuestros mismos esfuerzos y viven para siempre en el abrazo de Dios. La carta a los Hebreos define a esta compañía con la expresión "una nube ingente de testigos" (12.1). Eso son los santos: una nube ingente de testigos.