CARACAS,
La Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), dio a conocer un comunicado titulado "La violencia de los impíos los arrastrará, porque se niegan a obrar con justicia" en el que exigen se respete la vida de todo ser humano y en el que alientan a clamar en oración a Dios por el país.
El comunicado de la Comisión presidida por Mons. Roberto Lückert, se publica "ante la gravísima agudización de la violación de los derechos humanos y las libertades democráticas que sufren diversos sectores sociales de la Nación".
Los prelados expresan su solidaridad y cercanía con el pueblo venezolano, "en momentos en que el gobierno, garante superior de los derechos, la paz y la seguridad pública, se ha convertido en su principal trasgresor, violentando y atacando residencias familiares de ciudadanos indefensos, agrediendo sin distinguir localidades ni personas, situación que consideramos social y moralmente injustificable".
El texto denuncia que la violencia contra los ciudadanos la ejercen "los organismos de seguridad, particularmente la Policía Nacional, la Guardia Nacional Bolivariana y colectivos que usan armas prohibidas".
La violencia se registra prácticamente a diario en Venezuela, en donde no cesan las protestas desde hace más de dos meses ante la insostenible crisis económica, la grave escasez de alimentos y medicinas; y las graves violaciones a los derechos humanos por parte del gobierno.
La Comisión de la CEV también expresó su claro rechazo a la "convocatoria de una Asamblea Constituyente que niega y vulnera la progresividad de los derechos humanos y sumerge a la Nación entera en una situación de convulsión social y violencia".