CIUDAD DE MÉXICO,
La ausencia de autoridad o la impotencia de las mismas para enfrentar la criminalidad está motivando que los sacerdotes arriesguen sus vidas para evitar que México se siga desangrando a causa de la violencia y la pobreza, afirmó la revista católica Desde la Fe.
En un reciente editorial, la revista de la Arquidiócesis de México señaló que los hechos de violencia ocurridos en las últimas semanas en diferentes regiones del país muestran el agobio en que vive el pueblo, "al que no se garantiza los mínimos de seguridad".
Entre estos hechos, denunció, están los combates en Tamaulipas entre los cárteles de la droga, las reyertas en el penal de Reynosa, las 620 ejecuciones violentas ocurridas en Veracruz desde enero hasta abril, así como los actos de terror cometidos por los grupos criminales en Oaxaca; a los que "se suman amenazas y amedrentamientos a los ciudadanos, quienes deben sobrevivir en incertidumbre absoluta y estado de indefensión evidente".
Desde la Fe señaló que estos hechos también muestran "la impotencia de autoridades que tienen flancos abiertos" para responder a la delincuencia, pero también el "poder de la corrupción que carcome a los tres niveles de gobierno, en lo que se ha llamado la narcopolítica, relaciones de conveniencia entre delincuencia e instituciones para controlar y dominar a través de la violencia inhumana, acentuada por la corrupción política".
Esta "ausencia de autoridad que apacigüe al crimen, provoca que actores con autoridad moral salgan a dar la cara para acordar, por lo menos, algunas cláusulas de paz y seguridad para ciertos sectores que, en el pasado, gozaban de respeto", indicó en su editorial del 11 de junio.
Así, recordó que el 28 de marzo el Obispo de Chilpancingo-Chilapa, Mons. Salvador Rangel Mendoza, "no ocultó el acercamiento que sostuvo con miembros de la delincuencia para acordar lo que las autoridades ya no garantizan: seguridad".