SANTIAGO,
Un estudio de Finlandia determinó que el sistema educativo y la maternidad tienen efectos protectores en adolescentes embarazadas; y que el apoyo psicológico y social previene los suicidios que se dan en algunos casos después de un aborto.
El estudio finlandés hizo un seguimiento durante 25 años a 13691 adolescentes que concibieron un embarazo entre 1987 y 1989. De ese total, 6652 mujeres tuvieron un aborto y 7039 continuaron con su embarazo.
Las conclusiones fueron analizadas por Elard Koch, experto investigador de MELISA Institute (de investigación en salud materna y embrionaria), quien ante la discusión del proyecto de ley de aborto en Chile recomendó "considerar seriamente la evidencia científica".
En la columna titulada 'Embarazo adolescente y muerte prematura'. Koch explicó que "las mujeres que conciben un embarazo adolescente, comparadas con las que no lo hacen, exhiben mayor riesgo de muerte prematura por enfermedades circulatorias, causas asociadas al alcohol, accidentes, suicidio, heridas y envenenamiento".
"Un hallazgo central fue que el abandono del sistema educativo sería uno de los mayores determinantes de muerte prematura por cualquier causa, excepto la causada por suicidio", manifestó.
"En este caso, el estudio mostró que continuar el embarazo sería un factor protector, reduciendo 50% el riesgo de suicidio y 40% el riesgo de morir por heridas y envenenamiento. Las adolescentes finlandesas que abortaron, tuvieron mayor riesgo de morir por estas causas, aun cuando alcanzan un mayor nivel educacional".