VATICANO,
En un encuentro con la comunidad del Pontificio Seminario Campano de Posillipo, el Papa Francisco pidió a los formadores del mismo y a los seminaristas cultivar la "libertad interior", pero no con el dinero. "No lo olviden, el demonio entra por los bolsillos, siempre. Después sigue la vanidad, después el orgullo, la soberbia, y así termina", advirtió el Papa.
Francisco repasó brevemente la historia y recordó que el seminario fue fundado en 1912 por voluntad San Pío X y fue encomendado hasta la actualidad a los jesuitas.
Aseguró que en este tiempo es fundamental, "frente al desafío educativo", "caminar juntos, en un auténtico espíritu sinodal", por eso los invitó a "sosteneros, animaros y enriqueceros los unos a los otros".
"Este ejercicio de comunión y posterior enriquecimiento del encuentro con la rica tradición espiritual y pedagógica ignaciana que tienen los ejercicios Espirituales un seguro punto de referencia".
El Papa señaló 3 aspectos importantes para la formación de los sacerdotes. Por un lado, una espiritualidad sólida que favorezca "una amistad personal con Jesús". Para ello es importante "conocer, acoger y reformar: siempre en camino".
"Llamar las cosas por su nombre es el primer para con el conocimiento de sí y entonces para conocer la voluntad de Dios en nuestra vida".