CARACAS,
La Arquidiócesis de Mérida (Venezuela), expresó su profundo pesar y firme repudio por los hechos vandálicos cometidos por "un grupo de motorizados, encapuchados" contra el colegio La Salle y la residencia de los religiosos el miércoles 19, en medio de las manifestaciones contra el régimen de Nicolás Maduro.
El diario El Nacional informó que ese día miembros de los colectivos –como se conoce a los grupos afines al gobierno–, ingresaron violentamente al colegio, causaron destrozos "e hirieron a las personas que se encontraban en la manifestación convocada por la Mesa de la Unidad Democrática en la entidad y que habrían ingresado en las instalaciones para resguardarse".
El subdirector del colegio, Freddy García, dijo que los encapuchados destruyeron todo lo que encontraron en su camino e incluso se llevaron comida y equipos. "Lamentablemente no podíamos hacer nada, éramos hermanos los que estábamos adentro con algunos amigos que habían venido a visitarnos".
"No entendemos por qué se meten en una institución que es privada, que no hace mal a la colectividad, que cumple un papel fundamental en la educación, no entendemos qué está pasando en nuestro país, estos señores que tan violentamente y armados atacan a todos, que tristeza me da ver estas cosas, pero bendito sea Dios que estamos vivos y creo que nos podemos recuperar", expresó en declaraciones difundidas por Analítica.
Ante esto, la Arquidiócesis emitió un comunicado en el que junto a fieles y religiosos repudia estos "hechos vandálicos".
El texto, firmado por el Cardenal Baltazar Porras, señaló que es "inexplicable" que con un "despliegue desproporcionado de efectivos policiales y militares, supuestamente para mantener el orden" en la ciudad, sea posible que "un grupo de motorizados, encapuchados, perfectamente entrenados" actuaran "a sus anchas, sin que ninguna autoridad haya siquiera intentado impedir semejante atropello".