VATICANO,
En una carta escrita con motivo de la inauguración de un nuevo Santuario en Asís, Italia, el Papa Francisco recuerda a la Iglesia su deber de despojarse de la mundanidad y de revestirse de los valores del Evangelio.
En la carta, dirigida al Obispo de Asís-Nocera Umbra-Gualdo Tadino, Mons. Domenico Sorrentino, el Pontífice bendijo el nuevo Santuario de la Expoliación, que se abrirá a los fieles el próximo 20 de mayo, y valoró el testimonio de San Francisco de Asís como un ejemplo para la Iglesia y el mundo de hoy.
El nuevo Santuario de la Expoliación, en iglesia de Santa María Mayor, pretende recordar el gesto de un joven San Francisco que se despojó de todos sus bienes mundanos para entregarse por entero a Dios y a los demás.
El Papa recuerda en la carta que el ejemplo de San Francisco fue lo que le inspiró a la hora de tomar su nombre en el comienzo de su Pontificado. "Recuerdo bien la emoción de mi primera visita a Asís –señala en referencia al viaje pastoral que realizó en 2013–. Habiendo elegido, como inspiración ideal de mi Pontificado, el nombre de Francisco, la Sala de la Expoliación me hacía revivir con particular intensidad aquel momento de la vida del Santo".
Además, el Santo Padre reflexionó sobre el significado que aquella Sala, ahora convertida en Santuario, tiene para el mundo de hoy. "En esa habitación resultaba elocuente el testimonio de la escandalosa realidad de un mundo todavía marcado por las diferencias existentes entre un interminable número de pobres, a menudo desprovistos de lo estrictamente necesario, y la minúscula porción de propietarios que poseían la mayor parte de las riquezas y pretendían determinar los destinos de la humanidad".
"Por desgracia, dos mil años después del anuncio del Evangelio, y después de ocho siglos del testimonio de Francisco, estamos ante un fenómeno de 'desigualdad global' y de 'economía que mata'".