VATICANO,
En la Misa Crismal que presidió en la mañana del Jueves Santo, el Papa Francisco aseguró que "la Buena Noticia es la perla preciosa del Evangelio. No es un objeto, es una misión".
En la homilía, el Santo Padre se dirigió en especial a los sacerdotes, quienes hoy también celebran su día, y les dio algunos consejos.
"Todo lo que Jesús anuncia, y también nosotros, sacerdotes, es Buena Noticia. Alegre con la alegría evangélica: de quien ha sido ungido en sus pecados con el aceite del perdón y ungido en su carisma con el aceite de la misión, para ungir a los demás".
El Papa aseguró que "al igual que Jesús, el sacerdote hace alegre al anuncio con toda su persona. Cuando predica la homilía, –breve en lo posible– lo hace con la alegría que traspasa el corazón de su gente con la Palabra con la que el Señor lo traspasó a él en su oración. Como todo discípulo misionero, el sacerdote hace alegre el anuncio con todo su ser".
Durante la celebración, los sacerdotes renovaron las promesas hechas en el momento de la Sagrada Ordenación y después se procedió a la bendición de los santos oledos: para los enfermos, los catecúmenos y el crisma.
"La Buena Noticia puede parecer una expresión más, entre otras, para decir 'Evangelio': como buena nueva o feliz anuncio. Sin embargo, contiene algo que cohesiona en sí todo lo demás: la alegría del Evangelio. Cohesiona todo porque es alegre en sí mismo".