VATICANO,
La oficina del Vaticano que regula el uso de la forma extraordinaria del Rito Romano, autorizó la celebración de una Misa especial para la fiesta de Nuestra Señora de Fátima, con motivo de la conmemoración del centenario de esta aparición.
Mediante un decreto del 5 de abril, la Pontificia Comisión Ecclesia Dei permitió a los sacerdotes que celebran en la forma extraordinaria (en latín y ad orientem) celebrar una Misa Votiva del Inmaculado Corazón de la Santísima Virgen María el 13 de mayo de 2017, fecha en que se cumplen 100 años de las apariciones de la Madre de Dios en Fátima, Portugal.
La razón de esta decisión es que "muchos de los fieles cristianos adheridos a la forma extraordinaria del Rito Romano tienen una particular y ferviente devoción a la Santísima Virgen María de Fátima" y por un deseo "de alentar la devoción" a esta advocación, según indica la traducción del decreto de Gregory DiPippo, editor del New Liturgical Movement (Nuevo Movimiento Litúrgico).
El permiso es significativo porque en la forma extraordinaria, el 13 de mayo es la fiesta de tercera clase de San Roberto Bellarmino, lo que significa que habitualmente no se celebra la fiesta de la Virgen de Fátima.
En el caso de que se celebre una Misa Votiva del Inmaculado Corazón el 13 de mayo en la forma extraordinaria, esta puede incluir una conmemoración de San Roberto Bellarmino, según las rúbricas del Misal Romano de 1962.
Nuestra Señora Fátima se ubica entre las más famosas apariciones de la Virgen María. El 13 de mayo de 1917, los hermanos Francisco y Jacinta Marto, de 9 y 7 años, y su prima Lucía dos Santos, de 10 años, llevaban a sus ovejas a pastar cuando vieron la figura de mujer vestida de blanco y sosteniendo una rosario.