REDACCION CENTRAL,
La próxima canonización de los Niños Mártires de Tlaxcala, de México, los primeros mártires de América, podría tener un profundo impacto en las familias, aseguró el Arzobispo mexicano que ha acompañado la causa en los últimos años.
El hoy Arzobispo de Tijuana, Mons. Francisco Moreno Barrón, fue hasta hace apenas medio año Obispo de Tlaxcala, y con esa responsabilidad pastoral encabezó durante los últimos años el esfuerzo por llegar al final de la causa de canonización de los beatos Cristóbal, Antonio y Juan.
En declaraciones para ACI Prensa, Mons. Moreno Barrón destacó que la canonización de los niños mártires mexicanos "es un momento de gracia, de bendición para la Iglesia universal" y un llamado a que "valoremos la familia como un don de Dios".
"Espero que en otros países, como en el Perú, Estados Unidos, en donde quiera, sean también promovidos como patronos de la niñez en estos tiempos tan difíciles en que los niños son golpeados, abusados, en que falta realmente un respeto integral y una promoción de los mismos en la Iglesia y en la sociedad", dijo.
Los Niños Mártires de Tlaxcala fueron asesinados por odio a la fe entre 1527 y 1529, mientras evangelizaban y combatían la idolatría en sus comunidades, luego de recibir la catequesis y el bautismo de los misioneros franciscanos y dominicos. Apenas tres décadas atrás, en 1492, Cristóbal Colón llegaba a tierras americanas.
En el caso del Beato Cristóbal, fue asesinado por su propio padre, quien lo golpeó y luego quemó, furioso por la labor evangelizadora de su hijo. Antonio y Juan fueron asesinados a palos por pobladores de Cuautinchán, en Puebla, a donde fueron de misión.