DENVER,
El testimonio poco conocido de lucha contra contra los nazis del hoy beato Clemens von Galen se presenta hoy como una gran luz para la batalla por la defensa de la vida y la libertad religiosa.
Clemens Von Galen, Obispo de Münster en Alemania, no tuvo miedo de rechazar públicamente el programa de eutanasia de los nazis y las teorías raciales, y de expresarse en favor de los derechos humanos.
El Beato nació en 1878 en el seno de una familia noble en Alemania. Fue ordenado sacerdote en mayo de 1904 y tras su ordenación se dedicó a escribir sobre los orígenes y los límites del poder estatal, así como la importancia de votar considerando el bien común y no los intereses privados.
En los últimos años de la República de Weimar, el P. Von Galen apoyó al Partido de Centro Alemán, que buscaba insertar en la esfera pública una voz cristiana en defensa de los intereses católicos y los derechos humanos, que se unió con otros partidos en un esfuerzo por equilibrar el poder.
Sin embargo, el sacerdote no logró influir en muchos de sus conocidos para que apoyaran el Partido de Centro, mientras que otros católicos argumentaban que el Partido Nazi era más compatible con los ideales católicos.
Muchos obispos se propusieron disuadir a los católicos de ser miembros del movimiento nacionalsocialista, pero cuando Hitler suavizó su postura antirreligiosa y a principios de 1933 declaró que el cristianismo sería prominente en el gobierno de Alemania, los obispos le tomaron la palabra y comenzaron a permitir que los fieles se le unieran.