CARACAS,
El objetivo era robar las hostias consagradas, pues dejaron todo lo que tenía valor material, expresó fray Gilberto Urbaez, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación, en Maracaibo (Venezuela), al denunciar la profanación que sufrió el templo la noche del viernes 24 de marzo.
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), informó que el robo ocurrió entre las 11:00 p.m. (hora local) y la medianoche. "Un vigilante cercano escuchó unos ruidos y creyó que provenían de un centro comercial aledaño. Llamaron a la policía y los funcionarios percibieron un hueco en una de las puertas laterales. Le dieron con una piedra y la madera cedió", indicó.
El Episcopado añadió que "todo indica que los intrusos se dirigieron directamente al sagrario, donde se guardan las hostias sagradas".
"Fue un robo limpio. Generalmente cuando los antisociales entran así a una iglesia buscan cosas de valor material. Había computadoras, teléfonos, materiales de utilería, pero solo se llevaron el cuerpo de Nuestro Señor y el libro de lecturas que usamos para leer la Palabra. Esto nos produce un profundo dolor", indicó el sacerdote en la nota difundida por la CEV.
"A veces buscan elementos como el cáliz, por ejemplo, porque está bañado en oro, las hostias por lo general las tropiezan, las pisan y quedan migajas en el piso. Pero en este caso no. Todo estaba limpio. Solo entraron a llevarse El Santísimo. Sabemos que en el ámbito de la brujería la hostia si tiene un valor económico porque la emplean para usos satánicos", advirtió el párroco.
Es un ataque a la fe