BUENOS AIRES,
El Obispo de Quilmes en la provincia argentina de Buenos Aires, Mons. Carlos José Tissera, explicó cómo fue el ataque incendiario a la Parroquia San Juan Bautista del barrio Florencio Varela, y dijo que al igual que otros hechos similares ocurridos en estos días, todos son repudiables.
Mediante un comunicado, Mons. Tissera explicó que el pasado 10 de marzo luego de la Misa de las 7:00 p.m. (hora local), los feligreses salían del templo cuando "dos personas con barbijos, de entre 25 y 30 años arrojaron en la nave lateral del templo, cerca de la entrada, una botella de plástico con nafta y fósforos ardiendo".
"Esto generó un foco de incendio que apagaron enseguida los bomberos. Gracias a Dios, el incendio no pasó a mayores, aunque el malestar y la confusión por la humareda que invadió el lugar duró un rato", narró el Obispo de Quilmes.
Mons. Tissera detalló que cinco minutos después el párroco del templo, P. Marcelo Eyheramendy, junto al sacristán y gente de la parroquia se dirigieron a la Comisaría 1ra de Florencio Varela "donde radicó la denuncia correspondiente".
"Si bien aún es muy reciente sacar conclusiones, conversando con el Padre Marcelo pensamos que este siniestro podría tener relación con los episodios de violencia ocurridos el miércoles pasado frente a la Catedral Metropolitana de Buenos Aires y este viernes frente a la Catedral de La Plata", comentó.
Mons. Tissera invitó a "rezar por la justicia y por la paz" y manifestó su confianza en el esclarecimiento de los hechos.