MADRID,
En un artículo publicado con ocasión del primer Domingo de Cuaresma, el 5 de marzo de 2017, el Obispo de San Sebastián (España), Mons. José Ignacio Munilla, recordó un reciente espectáculo blasfemo en España y denunció la "idolatría de la felicidad".
El 27 de febrero, Drag Sethlas fue elegido como el nuevo Drag Queen del Carnaval de las Palmas de Gran Canaria (España). En ese evento, Sethlas presentó un acto blasfemo en el que se vestía como Jesús y la Virgen María, titulado "¡Mi cielo yo no hago milagros. Que sea lo que Dios quiera!".
En su artículo, titulado "Conversión, ampliando horizontes", el Obispo español advirtió que "en nuestros días, la idolatría de la felicidad, convertida en becerro de oro, pretende buscar su bien particular, desvinculándolo de la naturaleza de las cosas".
"Y no nos estamos refiriendo a los demás, ya que nuestra propia vivencia religiosa no está exenta del riesgo de quedar reducida a una espiritualidad consumista del bienestar interior", señaló.
Mons. Munilla destacó que, en el contexto del espectáculo blasfemo de Gran Canaria, "no es de extrañar que la llamada a la conversión, reiterada con especial énfasis en Cuaresma, sea percibida como contracultural y hasta trasgresora".
"¿Será cierto que el relativismo y el hedonismo son la consecuencia lógica e inevitable de un mundo sin Dios? ¿Serán ciertas las palabras que (Fedor) Dostoievski puso en labios de Iván Karamazov: 'Si Dios no existe, todo está permitido'?", cuestionó.