VATICANO,
En el primer domingo de Cuaresma, el Papa Francisco dedicó el Ángelus a explicar cómo Jesús vence al demonio al ser tentado en el desierto y aseguró que el cristiano debe luchar cada día contra el mal, para lo que se necesita tener una "familiaridad" con la Biblia y llevarla consigo como si fuese un teléfono celular.
"Este episodio nos coloca en un momento preciso e la vida de Jesús: justo después del bautismo en el río Jordán y antes del ministerio público", dijo sobre el Evangelio del día.
"Jesús ya está preparado para iniciar su misión, y ya que tiene un enemigo declarado, Satanás, Él lo enfrenta rápido, 'cuerpo a cuerpo'", explicó Francisco, quien añadió que "el diablo se aprovecha del título de 'Hijo de Dios' para alejar a Jesús del cumplimiento de su misión".
Francisco explicó que durante la Cuaresma "como cristianos somos invitados a seguir los pasos de Jesús y afrontar el combate espiritual contra el Maligno con la fuerza de la Palabra de Dios".
"Para esto se necesita tomar tener familiaridad con la Biblia: leerla a menudo, meditarla, asimilarla. La Biblia contiene la Palabra de Dios, que es siempre actual y eficaz".
"Alguno ha dicho, '¿qué pasaría si tratásemos la Biblia como a nuestro teléfono celular?'. Si la llevásemos siempre con nosotros; si volviésemos a por ella cuando la olvidáramos; si la abriésemos varias veces al día; si leyésemos los mensajes de Dios contenidos en la Biblia como leemos los mensajes del celular".