CARACAS,
Durante la Misa de Miércoles de Ceniza, el Arzobispo de Caracas, Cardenal Jorge Urosa, invitó a los fieles a aprovechar la Cuaresma para la conversión personal y también para ser "más solidarios" con quienes padecen hambre en Venezuela, país que enfrenta escasez de alimentos y medicinas a causa de la crisis económica.
Desde la Catedral Metropolitana, el Purpurado reiteró en su llamado a la solidaridad y compromiso social con los más necesitados; así como rezar por la familia y el país.
"La conversión es cambio de vida, arrepentimiento, transformación y renovación moral", afirmó. En ese sentido, "teniendo presente la bondad misericordiosa de Dios para con el pecador arrepentido, los invito, queridos hermanos, a renunciar al pecado y sus consecuencias, a dejar la frialdad religiosa y el materialismo, y a vivir de acuerdo a la palabra de Cristo".
"Hoy, dado el avance del secularismo, es decir, de la frialdad e indiferencia religiosa y del olvido y rechazo de Dios, del avance del desenfreno afectivo-sexual, y de tantos vicios y defectos, tales como la violencia y el odio, la corrupción, el despilfarro y la pereza, es más urgente que haya de parte de nosotros una verdadera conversión", insistió.
El Arzobispo de Caracas dijo que "hemos de abandonar todo cuanto vaya en la línea del pecado, y debemos ser en nuestra familia, en nuestra comunidad y en nuestra querida Caracas, promotores auténticos de una verdadera civilización del amor y de la justicia".
En ese sentido, explicó que para un verdadero cambio es necesario "intensificar la práctica religiosa, especialmente la participación en la Misa dominical, la recepción de los sacramentos y la oración fervorosa; dejar a un lado el pecado y acercarnos confiados al Dios de la misericordia".