MADRID,
Los miembros de la llamada Mesa eclesial para el diálogo educativo sostuvieron su primera reunión este jueves 2 de marzo en Madrid, con el fin de tratar los principales puntos en vistas a la próxima reforma de la educación que emprenderá el gobierno español.
La Mesa eclesial para el diálogo educativo se creó para reunir los aportes de la Iglesia en vistas a la reforma educativa, en la que se han reunido con un "talante y estilo positivo", según indicó el vocero de la Conferencia Episcopal Española (CEE), P. José María Gil Tamayo.
"Creemos que podemos aportar y vamos con ese espíritu de arrimar el hombro. Nos traemos entre manos algo muy importante como es la educación de nuestros niños y jóvenes", dijo el sacerdote.
Uno de los aportes que se quiere dar en este debate es que en las escuelas se dé estabilidad a la enseñanza del curso de Religión, y se proporcione seguridad a los padres, educadores y alumnos para evitar la politización de la libertad de la educación.
Según un comunicado emitido por la CEE, los participantes de la Mesa propusieron que el pacto educativo se asiente en los principios contenidos en el artículo 27 de la Constitución Española, basada en la Declaración Universal de Derechos del Hombre de la ONU.
El artículo 27 establece que "los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones".