ROMA,
Un grupo de milicianos irrumpieron y saquearon el seminario mayor de Malole, en Kananga, en la República Democrática del Congo el pasado 18 de febrero, denunció el rector, P. Richard Kitenge.
En declaraciones a una radio local, el sacerdote señaló que los hombres armados, miembros de la milicia Kamwina Nsapu, "rompieron sistemáticamente las puertas de las habitaciones y destruyeron todo lo que había dentro. Entraron en las habitaciones de los maestros y quemaron su equipaje".
El P. Kitenge informó que el ejército logró liberar el seminario después de una hora de enfrentamientos con los milicianos.
Por su parte, el Cardenal Laurent Monsengwo Pasinya, Arzobispo de la capital Kinshasa, dijo este martes a la agencia vaticana Fides que "se está incrementando el miedo, la ira, la incertidumbre" entre la población, y que en su incursión los milicianos también "propagaron el pánico entre las hermanas carmelitas en Kananga".
Sin embargo, el Purpurado señaló que además del ataque al seminario, un grupo de veinte jóvenes profanaron la parroquia de Santo Domingo de Limete, en Kinshasa. Han "tirado por el suelo el tabernáculo, saqueado el altar, roto los bancos, hasta llegar a tratar de prender fuego a la iglesia. La comunidad de los Padres Oblatos ha sufrido el ataque", denunció el Cardenal.
Según Fides, el Arzobispo dijo que estos hechos serían una respuesta al intento de la Conferencia Episcopal del Congo (CENCO) de mediar en la aplicación de los acuerdos de San Silvestre, que buscan sacar al país de la crisis política luego de la suspensión de las elecciones presidenciales y lograr un gobierno de unidad nacional.