BUENOS AIRES,
El Arzobispo de La Plata (Argentina), Mons. Héctor Aguer, llamó a los sacerdotes a dedicar algunas homilías a predicar sobre la muerte, un tema importante y fundamental para la Iglesia; e invitó a los fieles a cuestionarse si se están preparando para tener una buena muerte, ya que se trata del paso que todos haremos a la vida eterna.
"Creo que tenemos que acostumbrarnos a hablar de estas cosas sin obsesión, pero también sin miedo. Y yo pienso que, cada tanto, convendría que los curas digamos algo a la gente sobre que nos vamos a morir porque somos mortales", señaló el Arzobispo durante el programa de televisión Claves para un Mundo Mejor.
Durante la emisión del 11 de febrero, Mons. Aguer puso por ejemplo "la 'Introducción a la Vida Devota', de San Francisco de Sales, que es una obra muy popularizada para la meditación espiritual" y que "en la primera parte, capítulo 13, tiene una breve meditación sobre el sentido de la muerte para un cristiano, porque es algo que nos va a llegar a todos y que uno quiere alejar lo más posible, uno no quiere pensar en eso".
"A mí –expresó–, me aterra cuando leo las noticias y vemos un chico de 14 años que mata a otro de 14 años; o un muchacho de 28 que va a ser papá la semana siguiente y que lo matan para arrebatarle un celular que finalmente no le roban; y tantos casos que escuchamos. Qué cosa tremenda es eso ¿verdad?, esas muertes imprevistas y alguna impreparadas también".
El Prelado advirtió que "la muerte puede ser imprevista, pero no impreparada".
En ese sentido, explicó que "la interpretación cristiana de la muerte se hace desde la Muerte de Cristo, desde la Cruz, y esta acaba en la Resurrección y por eso nosotros sabemos que la muerte es un tránsito, es un paso, es una pascua".