Alepo,
El P. Ibrahim Alsabagh, párroco de Iglesia latina de San Francisco de Asís en Alepo, afirmó que el regreso del fútbol de la liga siria a esta ciudad golpeada por la guerra es un aliento para "reconstruir la unidad social" a través del deporte.
Así lo dijo el sacerdote a Radio Vaticana, al comentar el encuentro del pasado fin de semana que sostuvieron los equipo del Al Ittihad y el Al Horriya, en el que venció el primero.
El partido se pudo realizar luego de que las fuerzas del gobierno retomaran militarmente el control de la ciudad.
En medio de un campo de tierra, algo de pasto y con las gradas que muestran las huellas de las bombas, los aficionados alentaron a los jugadores.
"No puedo describir lo que se siente regresar al campo después de cinco años", dijo antes del partido Omar Hamidi, una de las estrellas del Ittihad. "Mi corazón está latiendo tan rápido", dijo en declaraciones a BBC.
Firas al Ahmad, jugador del Hurriya, afirmó que "es nuestro derecho jugar en Alepo. Allí lo hacemos mejor. Cuando jugamos en nuestro campo, con nuestros aficionados, nuestro rendimiento mejora".